La tendencia de diseño abierto sacude las bases de la tecnología

Junio 9, 2013 - Noticias, Publicaciones

Compartir

Las iniciativas de software libre y de fuente abierta, así como los estándares abiertos de interoperabilidad, han estimulado la creatividad de los “chicos duros”: hay un movimiento creciente por hacer diseños, especificaciones y componentes de hardware abiertos.

Un ejemplo es el Arduino: una plataforma de hardware libre para el “prototipaje” de proyectos multidisciplinarios con elementos electrónicos que captan datos del entorno e interactúan con él. Tiene un microcontrolador en una tarjetita con varios puertos, más un ambiente de desarrollo que posibilita la programación. Es open hardware, por lo que su diseño y su distribución son libres, lo que facilita el desarrollo de proyectos sin pagar licencias.

Por el lado de los centros de datos, Facebook inició hace un par de años el Open Compute Project (OCP), con el propósito de construir infraestructuras informáticas eficientes de bajo costo. La eficiencia no solo es computacional, también buscan optimizar el consumo energético y el espacio. Los hackers de Facebook diseñan racks , servidores, software y centros de datos de abajo hacia arriba, y comparte las tecnologías y sus especificaciones mientras evolucionan.

Esto comprende servidores de bajo costo; almacenamiento masivo inmutable perenne; centros de datos eficientes térmica y eléctricamente; entrada y salida virtualizada; tarjetas madre y chipsets especializados; administración de infraestructura e interoperabilidad.

Entre lo más novedoso es acometer los conmutadores ( switches ), pieza central de los centros de datos, y publicar una especificación abierta, que facilite la programabilidad y el control por software . Facebook y la Open Networking Foundation apoyan al OCP en el desarrollo de un conmutador de fuente abierta, que permitirá correr cualquier sistema operativo sobre hardware abierto. Esto podría sacudir las bases de las tecnologías cerradas que imperan en centros de datos.

Artículo publicado en el periódico El Financiero

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *