Laboratorios de pruebas

Diciembre 22, 2014 - Noticias, Publicaciones

Compartir

Los productos tecnológicos tienden a hacerse cada vez más complejos.

Aún si se mantuviera la complejidad constante, un producto como un microprocesador o un microcontrolador cada vez es más ubicuo como componente de un sistema complejo.

Tal componente podría gobernar sistemas cuyas acciones sean críticas para vidas humanas, operaciones financieras, ecosistemas, equipamientos, etcétera.

Los componentes de hardware genéricos como microprocesadores o microcontroladores serán utilizados de maneras muy diversas.

Estos usos van desde teléfonos celulares, tabletas, computadoras portátiles y servidores hasta sistemas híbridos sofisticados que integran hardware y software para aplicaciones específicas.

La diversidad de condiciones de uso y la complejidad de los dispositivos exige realizar experimentos sistemáticos que simulen situaciones del “mundo real”.

Estos comprenden no solamente la interacción física y lógica entre componentes, sino su consumo de energía, disipación de calor, alcance de transmisiones, deterioro, etcétera.

Es imposible hacer pruebas que exploren exhaustivamente todas las posibilidades.

Es por esto que debe abordarse los experimentos de una manera científica, que permitan un grado avanzado de certidumbre de que las situaciones probadas son suficientemente representativas de las que surgirán en los usos realistas, típicos y extremos, de diversas configuraciones, que deben ser diseñadas con buen juicio.

Intel acaba de inaugurar un “megalaboratorio” para probar, desde Costa Rica, sus innovadores diseños en etapas previas a la producción masiva.

Un gran reto y una excelente oportunidad para demostrar de nuevo el talento tico en Ingeniería e Informática.

Artículo publicado en el periódico El Financiero

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *